Cada vez somos más las voces que denunciamos los casos de falsos positivos en trámites de extradición, cada vez somos más las familias víctimas de un tratado entre Colombia y Estados Unidos que se creó en 1984 para combatir y castigar a los grandes capos de la droga y que se convirtió en los últimos ocho años en un tratado de una sola vía en el que el gobierno de Álvaro Uribe entrego más de 1.150 colombianos al Estado norteamericano para mostrar resultados en la lucha contra el narcotráfico. Si bien es cierto muchos de los llamados extraditables son jefes e integrantes de redes de tráfico de drogas y lavado de activos, también hay un número considerable de ciudadanos del común que lejos de ser esos jefes narcotraficantes están siendo detenidos con fines de extradición.